How to safe a life

Prólogo

La lluvia y el viento azotan la ciudad. Es noche cerrada y nadie se atrevería a salir del amparo de una casa para encarar la tormenta. Por lo menos, no lo harían aquellas personas que gozan de una familia que les quiere y de un sitio al que pueden llamar hogar.

Y aquí, en el cementerio, voy caminando yo, bajo el amparo de la lluvia y del viento. No me importa que me esté empapando hasta los huesos. Lo que he visto es mucho peor que un poco de lluvia. El chirrido del viejo columpio y los truenos son lo único que se oye aquí, la luz de los relámpagos lo único que ilumina las viejas lápidas. Y entonces, cansada de correr para así tratar de sacarme la espantosa imagen de la cabeza, me dejé caer de rodillas ante una de las lápidas.
-¡¡¿Por qué?!! ¿Por qué no me dejas ser feliz?
-Porque no tienes elección, tu intentando huir de tu destino has provocado todo aquello que te duele.
-¿Y cuando acabará esto?
-Cuando aceptes lo que eres y cuando te enfrentes a tu destino.
Silencio.
La lluvia y el viento han parado. Da igual donde estes, pero si sientes que ya no perteneces a ningún lugar, que todo aquello por lo que luchaste no merece la pena. Da igual si estás sola o en medio de un millón de personas. Seguirás estando solo porque esta soledad que te corrompe es venenosa, se aloja en tu corazón y lo va a apartando de la felicidad. Dos lágrimas bajan por las mejillas. No puedes seguir huyendo siempre... tarde o temprano, la oscuridad te alcanzará, y cuando eso pase tienes dos opciones: o luchas contra ella, o te dejas comer ¿qué decides?
-Pelearé.
Juras por lo bajo. Te lo han quitado casi todo: tu familia, tu amor, todo lo que te importaba se ha ido. Solo queda una cosa: tu dignidad, y esa no la vas a entregar tan fácilmente.

Capítulo 1.

Despiertas en la oscuridad, empapada en sudor. El sudor frío del miedo. Hace dos años que "moriste" para los demás, sin embargo, aunque por fuera pareces haberte forjado una coraza de hielo, por dentro todavía a veces les echas de menos.
Te levantas una vez más, dispuesta a encarar con furia a este mundo loco que quiere verte muerta en vida, humillada, tirada en el suelo a merced de la gente que te quiere hacer daño, haciéndote suplicar clemencia. Y como cada mañana burlas a ese destino una vez más.

Te miras al espejo de la habitación de hotel que alquilaste. Tu pelo pelirrojo ya está creciendo de nuevo. Con ayuda de una navaja te lo vuelves a cortar. Es ya una costumbre. Cuando eras pequeña solías llevar el pelo largo, era el símbolo de tu inocencia, pero ahora, a punto de cumplir 20 años y habiendo visto todo lo que has visto, ¿dónde queda la inocencia, Wendy? Murió. Murió y está enterrada con Elisabeth, la primera madre que tuviste, la única. Una enfermera de un orfanato te dio su apellido y tú le respondías diciéndole "mamá" cuando nadie os podía escuchar. Aunque hace dos años descubriste quienes eran tus padres biológicos, por mucho que lo intentaste, no pudiste adaptarte. Sencillamente..., para ellos ya eras demasiado oscura: mientras que tus hermanas visitaban las discotecas, tu ibas a caminar por el cementerio a hablar con los muertos. Tus hermanas salían con sus luces blancas, tu estabas con un vampiro. Tus padres creían que eras oscura. Hablaban mal de ti a tus espaldas. Tu nunca fuiste una Halliwell, Wendy. A pesar de ser hija de la gran Phoebe Halliwell, jamás fuiste como ella o como tus hermanas. Tu eres una Turner. Porque Turner fue Elisabeth, Turner fue el espíritu de Cole Turner, un demonio amante de tu madre asesinado por ella y que ahora y siempre te ha guiado desde el plano del mundo de los muertos. Por mucho que luchases por adaptarte, siempre se hacían palpables esas diferencias entre ellos y tú.

Luchaste por ser como ellos querían, al menos al principio. Pero el destino del que querías escapar te encontró. Isis, la diosa de los muertos contaba con tus poderes para librar una batalla importante. Tu te negaste al principio... hasta que descubriste la verdadera cara de aquellas personas con las que convivías: tu hermana pequeña te odiaba por "romper" la familia, tu gemela pensaba que eras un peligro. Tus padres, que eras una decepción. creíste que te podías refugiar en tu pareja, en tu vampiro. Si, te aferraste a Spike, pero él también te dejó, te dejó por una caza vampiros llamada Buffy Summers, con quien ya te había engañado alguna vez. Cuando la última cuerda que te mantenía a flote se cortó tu solo pudiste salir corriendo y aceptar que ese mundo no era para ti. De eso hace ya dos años. Dos años en los que has hecho lo que mejor aprendiste en el orfanato: aprender a sobrevivir a costa de lo que sea. Pero cuando te miras al espejo cada mañana, sabes que estás sola. En el fondo, siempre has estado sola. Una vez más, te vistes, y vas a trabajar al hospital cercano. Eres médico, y a la vez, la bruja más buscada por los altos demonios por el daño que les estás haciendo. Pero eso no te importa, ¿para qué? si quitando a los espíritus de los muertos con los que te relacionas, no puedes contarle a nadie tus logros.

¡Wow, Anastasia!
El fic está maravilloso, de verás.. empiezas fuerte, eh
Me esta gustando, y mucho. Al principio me pareció un poco rara la combinación entre Embrujadas y Buffy Cazavampiros, pero se ve que estas encajando muy bien los elementos. ¡Buen trabajo!
Esperaré ansiosa el siguiente cap *__*

Anastasia, loq eu te dije en el CB, me encantó tu historia!!! y más aún cuando mezclas Buffy con Charmed (que son dos de mis series favoritas, aunque ya se acabasen )
Wii quiero leer más!!!